jueves, 8 de mayo de 2008

Filosofía de partido: Defender y joder al base hasta la muerte!

Os seré sincero, me encanta el deporte. Es decir, me encanta hacer deporte. Sobretodo deporte en compañía, con amigos y compitiendo. Verlo no me atrae casi nada, pero practicarlo me encanta. Esa sensación de poder conseguir algo junto con los tuyos, y esforzarte por una victoria y ver que somos, y en concreto yo, que soy capaz de ser útil y hasta necesario en el equipo, esa sensación es inigualable, así como la del esfuerzo reconocido.

Concretamente yo jugaba a baloncesto, digamos que es un deporte que a base de años terminó por no dárseme mal del todo, aunque nunca llegué a un nivel competitivo serio.  Jugué durante 12 años en el equipo de mi pueblo, con chavales de mi edad. Compañeros, amigos al cabo de los años.

 Al principio de los principios, no tenía más que unos 6 o 7 años cuando empecé, recuerdo que éramos todos iguales, igual de altos, igual de críos, igual de torpes. Nos tuvieron que enseñar a botar el balón con una mano. Cuando supimos la mayoría hacerlo con una mano, tocó hacerlo sin mirar el balón. Recuerdo que para eso nos metían una visera debajo de la nariz puesta del revés, para forzar que miráramos al frente. Era imposible, recuerdo.

Pasaron los años y empezamos a controlar el tema del balón un poco más. En poco tiempo salieron los "buenos", compañeros que por su altura o por su habilidad tenían más facilidad que el resto para encestar. Esos enseguida empezaron a jugar más que los demás, ya que ayudaban a ganar los partidos. Estaban los del montón que, a pesar de todo, iban tirando y finalmente siempre había un par que no acababan de cogerle el truco. 

Yo no era ni bueno ni medio-bueno, era más bien entre medio-malo y malo. Mucho banquillo me he chupado yo. Existe un comentario habitual en plan de broma cuando conoces a alguien que practica el mismo deporte que tu. Preguntabas "Y tu de qué juegas?" y te respondían vacilones,.. "banquillo derecho, y tu?". La primera vez que lo oí me quedé patidifuso. Como podían aceptar tan claramente el hecho que no jugaban demasiado? Yo estaba igual o pero en tema de banquillo, pero nunca me fijé en los minutos de banquillo, siempre en los minutos de pista. Eran los minutos que me ganaba por mi trabajo, el salir a jugar. Si lo hacía aceptablemente regular, me daban más minutos. Eran unos minutos que yo apreciaba mucho. Quería ser bueno, quería poder ser alguien importante de mi equipo. Y cuando estaba en el banquillo, me pasaba los minutos animando al equipo. Aunque no hubiera tensión o perdiéramos de 40.


Luego pasó algo inusual, un día entrenando probé a saltar lo mas alto posible al hacer una entrada y, para mi sorpresa, pude llegar a tocar la red de la cesta. Nadie que fuera como yo o un poco más alto podía lograr esa hazaña. Estaba destacando en algo! Saltaba más que el resto! En parte era lógico, porque en mi familia es bajita, así que mientras mis compañeros estaban raquíticos pegando el estirón, yo ya dejaba de crecer lo poco que crecí y empecé el paso siguiente de la pubertad, es decir, empecé a ganar músculo. Puesto que las piernas eran lo que mas ejercitaba, estas se me pusieron como las de un toro. Era rapidísimo, i tenía bastante habilidad con ellas. Gracias a eso pude lograr el objetivo de ser de alguna ayuda en el equipo. 

Durante una época fui medio-bueno, llegando a encestar en algún partido hasta 12 puntos (lo nunca visto en mi, vamos). Lo más importante que aprendí de esa época y del baloncesto en general, es la cultura de la competición y de creer en el esfuerzo que uno quiere dedicar a las cosas, algo que después me ha servido toda la vida. 

Sabía que no era ni el mejor ni el segundo ni nada.. pero quería ser importante en el equipo, así que me tomé siempre los entrenamientos muy pero que muy en serio, como si de una final se tratara. Lo hacía por mi, por mejorar, para demostrar al entrenador que no me resbalaba la táctica o los ejercicios. Resultó que al tomármelo tan en serio, mis compañeros se estresaron conmigo porque no les daba tregua ni en ataque ni en defensa, corría como un poseso y defendía con todas las ganas, que no eran pocas. Eso les picó, y muchos se vieron forzados a esforzarse para mejorar y así poder estar al nivel que yo les exigía. Recuerdo concretamente un compañero con el que teníamos un medio pique del colegio por motivos que ahora resultan absurdos, pero entonces en los entrenamientos el chico no me perdonaba ni una, luchaba todas las bolas, y yo hacía lo posible para lograr mi éxito. Al principio en los partidos se negaba a pasar el balón aun cuando estaba solo, pero con el tiempo reconoció, creo, en mi un jugador de confianza. Siempre he defendido el esfuerzo en los entrenamientos, porque es el momento en que realmente mejoras tu técnica y agilizas tu juego, en los partidos no puedes intentar aprender cosas nuevas porque lo echas todo a perder ( hacedme caso, lo hice y nos plantaron unas palizas que "pa qué"). Es cierto que hay días mas inspirados y otros días en los cuales la tónica del equipo responde mas al pasotismo y cachondeo asociado a éste, con lo cual el entrenador se cabreaba y nos mandaba hacer ejercicios físicos de desgaste, yo me creía y comprendía las broncas del entrenador, sabía que lo estaba haciendo mal, y me sentía mal, entonces me aplicaba el ejercicio de castigo a mi mismo con toda la dureza exigida. Más de una vez el entrenador lo valoró puesto que era el único o de los pocos que se mataba en correr por un castigo. 

Evidentemente si ahora no juego es porque no conseguí mantener el nivel y la cualidad de jugador a medida que crecía y a los 18 años me dieron puerta. Seguía esforzándome, pero ahora ya todos eran fuertes y altos, y yo para mi desgracia nunca fui un buen anotador con lo cual el club prefirió buscar otros chavales mas capaces. Tuve un momento de "semi-glória" pero no pasó de ahí. Lo único que sé es que me lo pasaba muy bien jugando a baloncesto. Se me daba mal, cierto, pero lo disfrutaba y me esforzaba por ello. 

Cuando me dijeron que no me querían en el equipo el año siguiente, fueron todo elogios, " eres un jugador ejemplar, no te peleas con nadie, eres muy deportivo, reconoces tus faltas y no te quejas de los árbitros","en los entrenamientos todos saben que curras como nadie"... pero lárgate que no haces puntos (vino todo a decir eso). Lo tuve que aceptar, aunque me ofrecieron ir a otro club a jugar. Yo me negué. ¿Por qué? Porque yo el baloncesto lo disfrutaba con mis amigos, y jugaba por estar con ellos, no por mi talento personal. 

Buena idea? Bien, los ideales matan, ya se sabe.

A vosotros os gusta algún deporte? Creéis en el esfuerzo constante y el entrenamiento para lograr algo? 

Quiero opiniones! 

Merci! 

5 comentarios:

Álvaro dijo...

El baloncesto... ¡qué recuerdos! Yo también tuve una gloriosa etapa deportiva (baloncestísticamente hablando, si es que ese palabro existe) en el equipo del colegio en el que compartí aula con Francesc. Aún me vienen a la mente esos días que yo, un fornido y atlético muchacho, jugaba de alero-pívot-laotraposicióndelaquenomesaleelnombre, encestaba centenares de canastas y conseguía mil y una victorias para mi equipo. Era un semidiós.

Ok, vale, he exagerao un poco. La verdad es que jugando al baloncesto era un paquetazo más gordo que el de Nacho Vidal. Sólo servía para coger rebotes gracias a mi altura, y aún. No sabía botar el balón, a la que me lo intentaban robar les metía un codazo en las costillas, al realizar una entrada cometía pasos y falta personal en ataque, desconocía que cojones eran esos símbolos que hacía el del silbato con los brazos después de que soplara por él, pasando la pelota a un compañero que tenía a pocos metros lo mandé al suelo de un pelotazo en toda la cara... la lista es interminable. Y si en el primer párrafo he puesto que jugué en 3 posiciones diferentes en el campo, era porque no tenía ni pajolera idea de en qué consistía cada una, y me dedicaba a correr por toda la cancha, como si estuviera persiguiendo a un pollo. Creo que en 5 partidos jugados hice 4 o 6 puntos, y en el último partido finalicé mi carrera en el basket rompiéndome la pierna y estándome casi 4 meses de reposo en casa, estudiando 6o de EGB a distancia. Delante del televisor.

Nunca he sido bueno para el deporte. Nuncajamás. Almenos no a nivel competitivo... yo era de los que, en caso de ir perdiendo, pelotazo para arriba o contra alguien del equipo contrario. Con algo de suerte te llevabas a alguien por delante y podías empezar a remontar. Digamos que ésto no era lo mío, pero pese a todo me divertía.

Actualmente no practico deporte alguno, excepto el ir al gimnasio siempre que puedo e ir luego a beverme en cerveza las calorías quemadas en la cinta de correr. Y oye, como dice mi padre: "eso es salú".

PS: Jamás he tenido competitividad de equipo. Es más, aplicándolo a la universidad, diría que odio los trabajos en grupo. Y sé que se me olvida algo, pero ahora mismo no caigo.

Anónimo dijo...

Jo també he viscut el que tu amb tots els detalls inclosos, esforçar-me més pensant qe així tindré més reconeixement, la pressió dhaver de fer les coses bé els pocs minuts qe surts a la pista, poc qe hi jugues, i a sobre am tensió. Al final vaig veure qe m'agradava molt defensar, i l'objectiu era en pocs minuts qe tnia esgotar les 5 faltes personals, senzill i antiesportiu, gran medicina sana pa cuerpo y mente.
De fet el bàsqet no mha omplert mai tant com a tu. On no hi tinc potencial no hi gaudeixo.
Pero sí, m'agrada molt fer esport, hi gaudeixo, i molen les agulletes qè collons clar qe sí. M'agrada el futbito, t'agradaria, és semblan al bàsqet el buscar espais i tal i una defensa qe pressiona més, i pegarli patades a una pilota, cuanta adrenalina.
Ma mola caminar per la natura am els companys snse saber gaire bé on anem, am mapa barat i si hi ha boira millor. I un dia d'aqets, va, arreglaré la bici.

i la pregunta:
EL TENIS PER CUAN?! e?! ee!??

Se abre el telón,
y sale una tía qe estáa cañóooon!!reqetebombón i fresca.
Se corre el telón.

je
apa un petó trosset de pa color fresa con glaseado dearcoiris
XAVI

_MeiA_ dijo...

jo el què se'n diu esport, esport.. mmm.. no en faig... mai he estat apuntada amb cap esport de grup... sóc la de la llei del mínim esforç.
Vaig al gimnas, a fer màquines, que m'encanta... però no creguis que en faig moltes.. m'agrada assentar-me en una i començar a parlar amb el del costat... penso que és més divertit i passa l'horeta més be... jejej
i el què també m'agrada molt és anar a la muntanya a fer senderisme, posar-me la maleta a l'esquena i anar a fer les rutes (GR's), això mencanta... i arribar a la meta destrossada, contemplar tot el magnific paissatge... arribar a llocs que no es pot arribar sinó és amb les pròpies cames. L'últimes sortides que he fet ha set Sadernes-Talaixà-Sant Aniol... el Matagalls... i tot allò de la Vall d'Aran (aigüestortes, llac st maurici...) impressionant tot, sense paraules.
Després dormir com pots... a algun refugi o fent vivac... no se,, és una experiència molt bonica.
I ara m'estan ensenyan a escalar una miqueta... però ho trobo durillu...

bon cap de setmana!

Dani Moreno dijo...

Home pos jo d'esports que vols que et digui, la meva panxa cervezera ja demostra que va haveri un temps que vaig descuidarme molt en aquest tema. Jo es podria dir, que jugu a qualsevol esport que em posis, pro en cap soc especialment bo, mes aviat dolent, poder el que tenia que haver era centrarme mes en algun en concret, per exemple l'atletisme sem donava força be, sobretot les curses de resistencia, pro el problema es que el correr perquè si no hem motivava.

A l'adolescencia vaig canviar el correr per la bici, tipica de la epoca pre-moto, i vaig passar a recorrer la infinitats de camins rurals que hi ha al voltant de Caldes, i encara en recordo moltissims que quan surto a passejar amb la bici hi vaig.

I bueno actualment vaig a jugar a futbito amb els excompanys de feina (encara que ara al final ha corregut massa la veu i tot son killus de caldes, pro aixi m'entretinc repartint patades) i ara que s'acosta el bo, espero tornar a agafar la bici i nar por ahi a fer volts, simplement pel fet de fer alguna cosa...

He rigut molt amb el teu post i sobretot també amb el comentari de l'alvaro, encara recordo els seus patapums p'arriba k acabaven a la cara d'algú a la plaça d davant de casa seu...

Fins una altra ocasió!

Anónimo dijo...

Cesc!!!! juer, me'n havia oblidat de fer el meu comentari..


La veritat és que he tingut molta sort de trobar un esport tant complet i poder-lo anar practicant tots aquests anys, he deixat pel camí a molts companys i amics però per sort he conegut i segueixo coneixent molta gent nova i interessant.


Bé, i tot això ara es multiplica pel fet de començar l'etapa d'entrenador jeje (i tu també entrenador ocasional del Cadet B jajja). per sobre de tots els aspectes tàctics que s'han d'aplicar segons l'etapa en la que et trobis, m'encanta intentar inculcar als meus jugadors tot el que jo crec que és important per un esport d'equip com el bàsquet ja sigui competitivitat, esforç, disciplina, a saber aprendre dels errors per seguir millorant, aprendre a valorar els detalls, a tindre una filosofia d'equip (valors com el companyerisme, a sacrificar-se per l'equip i no per un mateix) etc etc etc.


Tot això s'intenta però amb els sumals que porto no es pot fer miracles xD espero que trobin el gust d'acabar un entreno i estar ben feliços, hagin entrat o no les cistelles, perquè ho han donat tot a la pista... i d'això tu n'eres un expert jaja com et vam patir els companys, i me'n alegro perquè vas ser un bon exemple per tots ;D

Doncs res, per mi bàsquet significa felicitat, estaré sempre en deute amb aquest esport (va.... ja paro que em poso sentimental i em cauen les llàgrimes... ;D)


XEVI